jueves, 22 de abril de 2010

Bonito salado

Justo en primavera, cuando todavía el calor no aprieta o, incluso, nos acompaña una lluvia refrescante, al mediodía, a la hora del aperitivo –el almuerzo, que dicen los rurales- suele apetecer tomar, si está disponible, un poco de bonito salado con tomate. ¡Es una delicia!.

Claro que, como la mayoría de las exquisiteces, requieren un pequeño training previo. Recuerdo en mi juventud, en Barcelona, en Las Ramblas concretamente, había un “colmado”, y en la vitrina, entre otras seleccions de quesos, algún fiambre, botellas y un sinfín de productos alimenticios ligeramente exóticos, siempre veía unas piezas extrañas, que luego supe que se trataba de mojama, huevas y otros salazones que nunca había probado, ni me apetecía lo más mínimo.

Ya treintañero, aterricé en el Sureste, Costa cálida, y territorio de salazones, aperitivos muy apreciados por los habitantes a esta altura del Mediterráneo. Pero quizá –o al menos eso me parece- el bonito es el más delicado de todos. Debemos considerar que, siendo una salazón, no está ni seco ni excesivamente salado.

No es fácil localizar una pieza en su punto exacto. Pero cuando se consigue, es una maravilla. Con un poco de tomate –ahora es el momento del raf-, algo de pan y un vinito que nos guste, es fantástico.

En la mi época dorada de treintañero, compartía frecuentemente aperitivos con Vicente, amigo y colega, y, en vísperas de su regreso a Madrid, le comenté:

-Vas a echar de menos el bonito.

-En Madrid tengo salmón. –Respondió rápido.

El salmón –y en aquella época más- es bueno, pero no es lo mismo.

Hay un libro maravilloso, que ya presenté en este blog, que nos ilustra sobre todo la clase de salazón.

Antes, los mismos de la pescadería solían separar las piezas que les parecían más apropiadas y procedían artesanalmente. Pero siempre los veías apartado insectos voladores con el trapo.

Bonito que se oferta en la página de Ricardo Fuentes

Los artesanos se transformaron en profesionales, y hoy existe ya una empresa -http://www.ricardofuentes.es/- que nos suministra estas gollerías. Entre el atún, los japoneses, los viveros, y demás preparados, es ya una multinacional, casi tan importante como la Coca-Cola. ¡Es broma!

lunes, 12 de abril de 2010

Medusas



Los que tenemos la suerte de vivir en un idílico rincón como Cabo de Palos, en ocasiones también observamos movimientos que nos sorprenden.

Recientemente descubrimos que los pescadores de caña que se entretienen a la entrada del puerto, se habían multiplicado y reinaba a su alrededor una inusual agitación. Enseguida pudimos enterarnos de que estaban pescando –en gran cantidad- lubinas, todas pequeñas, de 300 o 400 gramos, algo totalmente inacostumbrado en la zona, lo cual hacía pensar que podían provenir de alguna piscifactoría próxima.

A las pocas semanas, se origina otro revuelo, y los amigos vienen a decirme que tengo que fotografiar el extraño suceso:

-¡Hay medusas! ¡Muchas medusas, tiene que verlo!

Soy reacio a fotografiar cosas desagradables, mal tiempo, accidentes, en fin, todo lo que no es positivo. Pero finalmente claudiqué y me asomé al puerto para ver lo que ocurría.

La foto está tomada –igual que la anterior- desde unos dos metros de distancia, de pie en el borde del paseo, procurando no caerme al agua, con el zoom de la cámara, a media potencia.

Misma posición que las anteriores, y zoom al máximo.

La visión de estas pequeñas medusas, ocupando toda la superficie que abarcamos con la vista en las aguas del puerto, produce una sensación de plaga o alarma casi sobrenatural, especialmente si se ha leído la novela de “El quinto día” de Frank Schätzing.

Ver el vídeo pinchando AQUÍ

En el Mar Menor, hace unos años que hicieron su aparición las medusas y hubo que tomar medidas para proteger a los bañistas. La enorme cantidad de estos bichos, enseguida propició la siguiente fase, que fue pensar, imaginar, descubrir que quizá podrían se comestibles, con lo que, como se suele decir, se podrían matar dos pájaros de un tiro.

En ELDIARIO podemos leer -pinchar en el nombre- un escrito de J. M.ª RODRÍGUEZ LINARES, quien nos explica lo que queríamos saber. Copiámos un párrafo:

"Hay un dicho en a la cocina oriental "todo lo que se mueve es comestible". La medusa es el último grito en los restaurantes chinos, coreanos, tailandeses y japoneses; generando en el mercado asiático como en Estados unidos un negocio de miles de millones de dólares.

..."

Afortunadamente, hemos localizado un fantástico blog, CULINARIOSIDAD, de Fernando Canales, quien nos facilita incluso una receta en video, que se puede ver paso a paso.

Esta es la foto del plato terminado -podéis ver el video pinchando AQUI- , en el que la medusa está en el centro, que, según nos cuenta Fernando Canales, corresponde a la parte de la cabeza de la medusa, con unos tomates cherri confitados y todo encima de unas hojas de ostras.