Mi sobrino Javier, suele ocuparse personalmente de conseguir los mejores peces y marisco que aparecen en la zona.
El otro día un pescador le ofreció un ejemplar desconocido para él y automáticamente lo rechazó.
-Este pescado es sabrosísimo –le comentó el pescador-. Se alimenta de lo mejor: pequeños crustáceos, erizos de mar, etc. Esto hace que sea muy bueno.
Ahí saltó el “Pitu” -alias de Antonio-, colaborador nuestro:
-¡Pues el jefe como de todo lo mejor, todos los días, y de eso nada!
Javier aceptó finalmente el pescado -obsequio del pescador- y llevó la escopeta a la cocina y después de quitarle la piel –parece piel de cocodrilo, de lo dura que es- nos lo prepararon a la plancha.
Resultó un pescado muy fino y sabroso, que nos dejó verdaderamente sorprendidos. Javier está persiguiendo ya a los pescadores por si tienen más escopetas.
Hemos consultado y localizado diferentes direcciones. En larompiente.com, además de información encontraremos recetas para prepararlo y en pescamarina.com, también aprenderemos detalles de este pez.
martes, 6 de mayo de 2008
Pez escopeta
Pez escopeta
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hola amigo SEbastián.
ResponderEliminarYo tampoco he probado nunca el pez "escopeta", pero gracias a las direcciones que nos pones, me pondré en contacto y trataré de averiguar si por las tierras gallegas abunda o no.
En cualquier caso, siempre es un placer leerte, no hay post tuyo, del que no aprenda un montón de cosas.
De verdad que me alegra el haberte descubierto hace ya algún tiempo.
Un saludo.
4E
Hola, en Galicia si es abundante, especialmente de mayo a octubre. Yo te los puedo vender (soy pescador y mayorista). Además como es un pez no muy conocido (hace menos de 15 años que llego a nuestras costas) no es demasiado caro (te costaría sobre 4€/kg). Saludos.
EliminarEste Peixe Porco era una de mis capturas preferidas (por la facilidad que supone su amplio perfil) cuando practicaba la pesca submarina deportiva, antes de romperme el tabique nasal.
ResponderEliminarLa mejor receta del mundo, para mi gusto: Tras haber pescado personalmente este peixe porco, se eviscera y se le arranca la piel en el propio barco o en la orilla, limpiándolo en agua de mar (siempre que la limpieza de la misma ofrezca garantías).
Se prepara una hoguera (y si es en la playa, aún mejor) y, mientras se preparan unas buenas brasas, aromatizadas al final con ramas verdes de laurel, se va cortando el pescado en porciones que se untan con buen aceite de oliva, ajo picado y, según gustos, laurel o perejil, sin añadir más sal que la que le proporcionó el lavado en el mar. Se cocina brevemente sobre una parrilla y se disfruta de inmediato, a poder ser comiéndolo en la propia playa.
Y si luego podemos tumbarnos en la arena a disfrutar de un rato de una noche de verano, tendremos la experiencia completa.
No es fácil que se den las condiciones, pero si se consigue...
Amiga Pimienta:
ResponderEliminarTe darás cuenta de que, de quien tenemos que aprender, es del amigo Jorge, del Gourmet de provincias. Nos ofrece hasta una estupenda receta.
No me canso de repetirlo, el paraíso está en Galicia.
Mi padre, que era catalán y cocinero, recuerdo que al único amigo que una vez invitó a nuestra casa –estoy hablando de hace sesenta años- se llamaba David, también era cocinero y era gallego.
Un saludo,
Sebastián Damunt
Amigo Jorge:
ResponderEliminarCome le comento a Pimienta, de Cuatro Especias, siempre me asombran y entusiasman tus escritos sobre gastronomía y demás temas.
Agradezco la estupenda receta que nos has dejado en el blog, y no te aseguro que vaya a realizarla exactamente como explicas, pero muy cerca andará la cosa.
Un saludo,
Sebastián Damunt
Sebastián:
ResponderEliminarMe temo que tendrás más fácil reproducir la receta tú que yo, aunque tan sólo sea por la proximidad a la costa.
Hablando más en serio, es un pescado que me trae agradabilísimos recuerdos de cuando tenía 15 o 16 años y salía a pescar todo el día con los amigos en la Ría de Arousa. Después, sin pasar por casa, cocinábamos la captura en la playa, compartíamos la cena con los amigos y seguíamos -cosas típicas de esa edad- con música y guitarras hasta el amanecer. Cuando no acabábamos durmiendo en la playa, tumbados bajo una barca dada la vuelta para protegernos del rocío de la mañana que, aquí en Galicia, también suele aparecer en julio y agosto.
Me temo que, aunque hoy encontrase ese pescado en una tienda, no me sabría igual.
Hay que ver la nostalgia que me has provocado.
Saludos.
Me has decidido a escribir sobre el tema.
ResponderEliminarGracias
Amigo Jorge:
ResponderEliminarComo es habitual en ti, nos has dejado un precioso recuerdo nostálgico de juventud.
Claro que enseguida he visto en tu blog –Gourmet de provincias- la entrada RECUERDOS LEJANOS, y ahí ya nos hacemos una idea más concreta de tus actividades en aquella época.
Un saludo,
Sebastián Damunt
Amigo Abraham; tomo buena nota de tu oferta. Si en alguna ocasión hace falta, intentaré contactar contigo.
ResponderEliminarUn saludo,
Sebastián Damunt